Cuando lo más profundo de tu corazón,
toda conmovida, lo sientes todo,
todo cuanto alguna vez te fuera deparado
de alegría o de dolor,
y el pecho aborrascado, te palpita
y pugna por desahogarse en el llanto
y su ardor acrécese no obstante,
y todo tu ser vibra y palpita y se estremece,
y los sentidos se te nublan,
y parece que vas a sucumbir,
y te desmayas y todo en torno tuyo
súmese en tinieblas,
y tú, penetrada del más íntimo, personal sentimiento,
abarcas con tu alma un mundo entero,
entonces, muere el ser humano.
(Goethe)
toda conmovida, lo sientes todo,
todo cuanto alguna vez te fuera deparado
de alegría o de dolor,
y el pecho aborrascado, te palpita
y pugna por desahogarse en el llanto
y su ardor acrécese no obstante,
y todo tu ser vibra y palpita y se estremece,
y los sentidos se te nublan,
y parece que vas a sucumbir,
y te desmayas y todo en torno tuyo
súmese en tinieblas,
y tú, penetrada del más íntimo, personal sentimiento,
abarcas con tu alma un mundo entero,
entonces, muere el ser humano.
(Goethe)